Visitar el Centro Histórico de Lima, declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO, es sumergirse en la riqueza cultural, arquitectónica y social de una de las ciudades más antiguas de América. Este corazón colonial de la capital peruana es un destino ideal para quienes buscan un turismo sostenible, comprometido con la conservación del patrimonio y el respeto por las comunidades locales.
Caminar por sus calles empedradas, admirar la Plaza Mayor, la Catedral de Lima, y los majestuosos balcones coloniales, permite al visitante conectar con siglos de historia, mientras se promueve la preservación del patrimonio histórico y se fomenta una economía local más justa e inclusiva.
Una joya especial en este recorrido es la Casa Aliaga, considerada la residencia colonial más antigua de América habitada por la misma familia desde el siglo XVI. Su apertura al turismo cultural es un ejemplo de gestión responsable del patrimonio privado, donde se busca equilibrar la protección del legado arquitectónico con la experiencia del visitante.
La visita guiada a la Casa Aliaga no solo permite conocer su exquisita colección de arte y mobiliario colonial, sino también reflexionar sobre la importancia de prácticas turísticas sostenibles, que valoren el uso consciente de los recursos y promuevan el respeto por las tradiciones locales.
Explorar Lima desde esta perspectiva es más que hacer turismo: es participar activamente en la conservación de la identidad cultural y en el desarrollo de una ciudad más sostenible, donde el pasado y el presente conviven en armonía.